Ya queda poco para que de comienzo el verano. ¡Qué ganas tenemos de desconectar de nuestras tareas diarias! No obstante, aunque estemos de vacaciones, seguimos conectados a Internet para leer el correo electrónico, actualizar nuestro estado en las redes sociales y consultar páginas web para encontrar restaurantes, sitios turísticos que visitar o actividades de ocio disponibles.
Generalmente, para no cargar con nuestro equipo portátil en la maleta, hacemos uso de ordenadores públicos disponibles en los hoteles, bibliotecas, cibercafés, aeropuertos, etc. para conectarnos a Internet. Sin embargo, si hacemos uso de éstos, debemos tener en cuenta varias consideraciones ya que estamos ante ordenadores sobre los que nosotros no tenemos el control y desconocemos absolutamente el estado de los mismos. Con «estado» nos estamos refiriendo a que quizás no estén libres de virus, que puedan tener instalada alguna aplicación maliciosa para el robo de información, etc.
Algunas consideraciones que nos pueden resultar útiles:
- No a las transacciones económicas. No realizar ningún tipo de transacción económica ni operación que requiera la introducción de credenciales sobre un servicio que consideremos crítico (banca online, compras, acceso al correo de la empresa, etc.) en estos ordenadores.
- Intentar no introducir tu usuario y contraseña. Ya sea en redes sociales, correos, portales de compra.
- Eliminar tu rastro digital. Utilizar la opción «navegación privada» (en Firefox), «Incógnito» (en Chrome) o «InPrivate» en Internet Explorer que tras hacer uso de un servicio – acceder al correo, redes sociales, navegación, etc. – y una vez cerrado el navegador, eliminará cualquier rastro de nuestra actividad en el ordenador.
- Cierra todas las sesiones que hayas iniciado. Además de hacer uso de la funcionalidad anterior, SIEMPRE debemos cerrar las sesiones de todos los servicios a los que hayamos accedido. En caso contrario y si únicamente hemos cerrado la ventana del navegador, el siguiente usuario que acceda al ordenador, podrá tener acceso a nuestra información.
- NUNCA “Guardar usuario y contraseña”. Atentos cuando el navegador nos pregunte «Guardar usuario y contraseña». Debemos contestar que NO para que estos datos no se almacenen en el ordenador y así evitar que otras personas tengan acceso a nuestra información.
- Utilizar las medidas de seguridad de proveedores. Algunos proveedores de correo electrónico están aplicando medidas de seguridad extra para acceder al correo electrónico, de tal forma, que para acceder a éste, además de introducir una contraseña, es necesario un código aleatorio que recibimos a través de un SMS o una aplicación instalada en nuestro smartphone. Google por ejemplo, nos proporciona la «verificación en dos pasos».
- Cambiar la contraseña. Otra alternativa podría ser modificar la contraseña que se emplea normalmente para acceder al servicio, por una temporal que utilizaremos durante las vacaciones y que al regresar de las mismas reestableceremos para volver a utilizar el servicio. Esto siempre y cuando contemos con un mecanismo alternativo de recuperación de credenciales (móvil, email alternativo, etc.).
- Crear cuenta de correo nueva. Si contamos con cierta destreza sobre las nuevas tecnologías, una posible solución a la hora de poder acceder a nuestro correo electrónico es crear una cuenta nueva a la que redireccionar todos los correos que nos llegan a la cuenta habitual. De ese modo esa cuenta se puede ver comprometida, pero nunca llegaremos a poner en peligro la «original».
- Utilizar teclados vituales. Otra medida que podemos utilizar son los teclados virtuales portátiles. Se tratan programas que podemos transportar fácilmente en nuestro USB, y que tras ejecutarlos, muestran por pantalla un teclado. Para introducir nuestro usuario y contraseñas deberemos hacer clic sobre las teclas correspondientes. Con este tipo de programas, evitamos que nuestros datos sean capturados por keyloggers.
- Ojo con los USB. Mucho cuidado con los USB que conectamos en los ordenadores públicos ya que existen aplicaciones que al conectar el USB al ordenador, son capaces de capturar todos los datos almacenados en éste. Por este motivo, si vamos a conectar u
no, debemos asegurarnos que no contienen información personal o crítica. - Mira por encima de tu hombro. Aunque quizás sea una medida un tanto paranoica, no está de más vigilar a quien tenemos a nuestra espalda cuando hacemos uso de estos ordenadores públicos. Nunca se sabe a quién pueden interesarle nuestros datos?
- Si tienes un Smartphone úsalo. Si disponemos de un teléfono inteligente (smartphone) con conexión a Internet, siempre usaremos este dispositivo para realizar las actividades más críticas como consultas a nuestro banco online o realizar alguna compra en línea. Pero ojo con usarlo con una conexión wifi como indicamos en el siguiente punto, podrías quedar expuesto.
- Cuidado con las Wi-Fi gratuitas. Lo gratis te puede costar caro. Cuando usas tu teléfono inteligente o tableta, estás enviando información sensible como nombres de usuario, contraseñas, fotos, mensajes de correo, mensajería instantánea (WhatsApp) y recíprocamente también la recibimos (información bancaria, mensajes de correos, etc). Las Wi-Fis abiertas, son redes compartidas, por tanto ten en cuenta que otros usuarios con algo de conocimiento y destreza pueden llegar a ver lo que estás enviando y recibiendo en estas redes.. Es mejor utilizar tu red de datos para este tipo de intercambios
Espero que así tomes más conciencia de los peligros que te acechan al utilizar ordenadores o Wi-Fi públicos
¿Has tenido algún problema alguna vez en un ordenador público? Cuéntanoslo